TRAS LAS HUELLAS DE CLARET EN CUBA

TRAS LAS HUELLAS DE CLARET EN CUBA

DIA 24 DE SEPTIEMBRE 2021

“CON LA AYUDA DEL SEÑOR CUIDE DE LOS POBRES”
CASA DE CARIDAD EN PUERTO PRINCIPE

Iba pasando el tiempo y la Casa de Caridad en Puerto Príncipe se iba construyendo.
El día 2 de Junio de 1855 Claret escribía desde Santiago de Cuba al P. Paladio Curríus: “Recibí de usted y quedo enterado de cuanto en ella me dice respecto de la Casa de Caridad y me parece muy bien todo. Me parece que cuando tenga usted las cosas en estado que no sea tan precisa su presencia podría confiarla a alguno de los muchachos que le inspiren más confianza; y entonces usted venirse a esta por una temporada y así podría hablar de la casa de Caridad”. (more…)

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TRAS LAS HUELLAS DE CLARET EN CUBA

TRAS LAS HUELLAS DE CLARET EN CUBA

DIA 23 DE SEPTIEMBRE 2021

“CON LA AYUDA DEL SEÑOR CUIDE DE LOS POBRES”

CASA DE CARIDAD EN PUERTO PRINCIPE

“Mientras que esta casa (de Caridad) se iba adelantando escribí una obrita que se titula Delicias del campo, cuya obra encierra en embrión la Casa de Beneficencia comenzada. (more…)

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TRAS LAS HUELLAS DE CLARET EN CUBA

TRAS LAS HUELLAS DE CLARET EN CUBA

DIA 22 DE SEPTIEMBRE 2021

“CON LA AYUDA DEL SEÑOR CUIDE DE LOS POBRES”

CASA DE CARIDAD EN PUERTO PRINCIPE

Para llevar adelante esta importantísima obra de promoción social el Arzobispo Claret compró el día 8 de diciembre de 1855 a Don Juan Arango un potrero de su propiedad, llamado “La Faltriquera”, de 2.253 cordeles por la cantidad de 2.253 pesos. Este terreno estaba en los ejidos de Puerto Príncipe. Más tarde compró otros terrenos contiguos. (more…)

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TRAS LAS HUELLAS DE CLARET EN CUBA

TRAS LAS HUELLAS DE CLARET EN CUBA

DIA 21 DE SEPTIEMBRE 2021

“CON LA AYUDA DEL SEÑOR CUIDE DE LOS POBRES”

LA GRANJA – ESCUELA, CASA DE BENEFICENCIA O CASA DE CARIDAD EN PUERTO PRINCIPE

“Al frontis del establecimiento o casa, o la parte de los niños, había de haber un gabinete de física y aparatos de agricultura, un laboratorio de química y una biblioteca. A la biblioteca se había de dar entrada a todo el mundo, dos horas por la mañana y dos por la tarde; a la clase de agricultura, tres días a la semana, a todos los que quisiesen asistir; lo demás era para los internos” (Aut. 566) (more…)

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