ALGUNAS ORIETACIONES QUE DA CLARET PARA LA LECTURA DE LA BIBLIA
EXPERIENCIA PERSONAL DE CLARET COMO ARZOBISPO DE SANTIAGO DE CUBA

1. Fuerte motivación: SUPERAR LA DESIDIA
Para Claret, así lo fue en su vida personal, lo principal para leer la Palabra de Dios es la motivación: la afición.
Y es la falta de motivación la que denuncia en su ambiente y la que le impulsa a actuar para ayudar a superarla.

Y así, como hemos dicho, Claret trabaja en la propagación de la Biblia facilitando su uso y adquisición para ayudar a superar la “desidia” – decía él – que existía en algunos de sus hermanos y compatricios. Por otra parte, avisa sobre la inutilidad de los libros si no hay motivación para leerlos.

2. Valoración prioritaria de la Biblia:

«LA LECTURA DE LA SAGRADA BIBLIA OCUPARA EL PRIMER LUGAR».

Claret era también muy aficionado a leer y a recomendar la lectura de libros buenos de todo tipo, especialmente religiosos y piadosos. Sin embargo, será el libro de la Biblia el «más apreciado» y el que tendrá prioridad absoluta entre todos, aun entre los más devotos y piadosos.

En la Carta Ascética dirá: «La lectura más piadosa que podemos tener es la del santo Evangelio».

Y en la Pastoral al Clero de su querida Arquidiócesis de Santiago de Cuba pedirá a los sacerdotes que lean y estudien libros de teología y ascética; no obstante, «…la lectura de la Sagrada Biblia ocupará el primer lugar…». “Todos los días leeréis cuatro capítulos de la Sagrada Biblia, dos por la mañana y dos por la tarde; y como a todos os proporcionamos la traducida por el P. Scio, bueno será que, si las ocupaciones os lo permiten, leáis también las preciosas notas que en muchos versos de cada capítulo trae, con lo que tendréis más conocimiento…”.

Esta prioridad en la mente de Claret viene también deducida del hecho de recomendar la lectura diaria de la Biblia y de la recomendación de dedicarse al estudio de ella de una manera “asidua y atenta” y “con la mayor fidelidad y esmero”, y de meditarla “sin descanso”; ningún otro libro merece una consideración tan especial y privilegiada.