Transcripción homilía de P. Josvel Lazo Cordero Párroco de San José Obrero
Eucaristía Cuarto domingo de Pascua
Domingo del Buen Pastor
Basílica Santuario de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre
25 de abril de 2021
“Yo soy el Buen Pastor. El Buen Pastor da la vida por las ovejas”. Juan 10, 11
Queridos hermanas y hermanos,
La liturgia de hoy nos presenta a la figura de Jesús Buen Pastor, que da su vida para darnos vida y ahora está en medio de nosotros como el Resucitado.
La figura de Jesús Buen Pastor impactó profundamente la vida de los primeros cristianos. Ya en las catacumbas de Roma se le representa como un joven, en medio de los pastos, ha recogido la oveja perdida y la lleva en sus hombros.
El evangelio de hoy leemos que Jesús comienza diciendo: Yo soy el Buen Pastor. ¿Qué significa que Jesús sea el buen pastor?
El mismo evangelio lo responde. Jesús es Buen Pastor porque da la vida por las ovejas, Jesús es Buen Pastor porque defiende a sus ovejas del peligro y del mal simbolizado por el lobo rapaz, Jesús es Buen Pastor porque conoce a las ovejas y las ovejas lo conocen a él, Jesús es Buen Pastor porque siente el deseo de ampliar su rebaño.
Jesús es el Buen Pastor, lo hemos dicho en más de una ocasión. Jesús es Buen Pastor las veinticuatro horas, los 365 días del año. Y nosotros somos sus ovejas y lo somos siempre. El Buen Pastor da la vida por las ovejas, estas palabras se realizaron plenamente cuando se inmoló en la cruz, ofreció su vida en sacrificio por todos nosotros, por ti, por mí, por todos.
Una vez escuché que cuando Jesús moría en la cruz se le acercó la serpiente y le susurró en el oído: Jesús no merece la pena sufrir y morir por los hombres, por esas ovejas desagradecidas. Mándalas todas al infierno. Y Jesús contestó a la serpiente: prefiero morir a dejarlas de amar. Por eso Jesús nunca dejará de amarte. Nunca dudes de su amor. No te preguntes quién eres para merecer tanto amor. Simplemente te ama y ha dado su vida por ti.
A diferencia del mal pastor que piensa en sí mismo y explota a las ovejas. Jesús Pastor piensa en las ovejas, alimenta y protege a sus ovejas y todo esto pagando un alto precio, la entrega de su propia vida en la cruz.
Jesús como Buen Pastor conoce a sus ovejas y estas lo conocen a Él. La palabra conocer en la Biblia no se refiere a una actividad puramente intelectual, conocer para Jesús es también una experiencia, un encuentro, una vivencia desde el amor.
Qué bien nos hace saber que Jesús nos conoce a cada uno personalmente. No somos anónimos para Él. Él nos conoce y nos ama y se ha entregado a sí mismo por mí.
La relación del Buen Pastor con sus ovejas no es fría, no es impersonal, si no centrada por una relación de comunión, apasionada, una relación ardiente de corazón.
Para Jesús no somos números, Él conoce nuestra historia, nuestras dificultades, nuestros defectos, sabe bien cómo somos. Porque nos ama, nos acepta tal como somos y nos sumerge en la comunión profunda con Él.
Jesús, Buen Pastor nos enseña y nos impulsa a dar la vida por los demás. La vida se nos ha dado para darla, para gastarla en favor de los demás y para que los demás tengan vida abundante y eterna.
Hoy en día unas tres cuartas partes de la población mundial no conoce a Cristo. ¿Cómo colaboro con la misión de Jesús de buscar otras ovejas para su rebaño?
En esta fecha celebramos también la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones. Hoy pedimos por las vocaciones de especial consagración: los obispos, sacerdotes, los religiosos, las religiosas, y oramos por ellos. Pero también, en esta celebración a los pies de la Virgen, oramos para que el Señor siga llamando a los jóvenes en nuestra patria, para que puedan decir sí a la llamada de servir y anunciar el Reino de Dios.
Amén.