Irradia emisión del 27 de diciembre de 2020
Transmitido por RCJ, el Sonido de la Esperanza
Programa Radial de la Arquidiócesis de Santiago de Cuba
Domingo I del tiempo de Navidad
Fiesta de la Sagrada Familia
“El Niño crecía y se fortalecía, llenándose de sabiduría; y la gracia de Dios estaba sobre él” Lucas 2, 40
(Música, Venid Fieles todos, DR)
Para llegar a ti como una bendición, para abrir tus alas al amor de Dios.
Irradia. Un proyecto de la Oficina de Comunicación de la Arquidiócesis de Santiago de Cuba.
Saludos a todos los que nos acompañan en este día en que venimos a compartir la fe con nuestra comunidad.
Bienvenidos a este encuentro fraternal con la iglesia toda, como cuerpo místico de Jesús.
Irradia está contigo, irradiando la fe.
(Música, Venid Fieles todos, DR)
Para la reflexión de hoy nos acompaña el P. Juan Elizalde, párroco de Santa Teresita.
Un saludo para todos, desde el lugar y el momento que estén escuchando este programa. Y mi saludo quiere ser hoy cargado de bendiciones, de mis mejores deseos para todos en esta Navidad. ¡Feliz Navidad!
Este domingo voy a compartir con ustedes con mucha alegría este tiempo de oración y de reflexión, soy el P. Juan Elizalde, de la parroquia de Santa Teresita del Niño Jesús en Santiago de Cuba. Juntos haremos este compartir que nos inserta en la comunión del amor de Dios, hecho hombre por nosotros.
El texto evangélico que vamos a proclamar está tomado del evangelio de San Lucas, capítulo 2 y los versículos del 22 al 40.
(Lectura del evangelio de San Lucas, capítulo 2, 22-40)
Hace unos días celebramos la fiesta de Navidad, y hoy domingo, la palabra de Dios enfoca nuestra atención en La Sagrada Familia, aquella humilde familia, de la que Jesús tuvo necesidad para ver la luz del sol y para crecer como hombre.
A la Sagrada Familia de Nazaret, la imaginamos una familia normal. Con la normalidad propia de la santidad, que consiste en hacerlo todo con amor y por amor a Dios, lo que hacemos todos. En esa familia pues se encuentra:
-Un padre carpintero, que inició al hijo en las artes manuales de su oficio para servir a la comunidad a través de su tarea.
-Una madre generosa, capaz de guardar en el corazón los tesoros silenciosos de su experiencia de vida.
-Un Hijo que crecía en amor y sabiduría delante de los ojos de Dios y de todos los hombres, escuchando a sus padres y siguiendo las tradiciones de su pueblo.
En el hogar de María y José había una maravillosa armonía, donde Jesús pudo prepararse para su misión en el mundo: escuchó de los labios de María los relatos que le introdujeron en el conocimiento de la Sagrada Escritura, y aprendió del testimonio de José las actitudes humanas que más tarde puso en práctica.
Seguramente que la Sagrada Familia fue una maravillosa escuela de diálogo, de comprensión y de oración. Un modelo donde todos los cristianos podemos encontrar el ejemplo y la seguridad de que, es posible vivir en familia y de acuerdo con la voluntad de Dios.
Por eso, en esta fiesta, pedimos a Dios que nos ayude a apreciar y amar a nuestras familias, para que sean realmente signo de su presencia y amor en el mundo.
También pidamos, por la buena relación de los padres con los hijos. La palabra de Dios, nos habla de una educación que no sea dominio sino servicio, y que facilite el surgimiento de los valores y las capacidades de los hijos.
Jesús se preparó para su misión dentro de un hogar, el hogar de Nazareth. Y en aquella humilde familia donde trabajó, meditó y vivió la sabiduría, aprendió a ser hombre y se preparó para la delicada misión que se le había encomendado.
No celebraríamos bien la Navidad, si no nos diéramos cuenta de lo importante que es preservar y amar a nuestras familias.
La ruptura y la desintegración de las familias, deshumaniza a la sociedad, porque saca a Dios del centro de la vida de las personas y del mundo.
La familia es para el cristiano el lugar donde todo lo humano tiene cabida y sentido, es el lugar donde vivimos la experiencia de ser amados por Dios a través del amor de los nuestros y aprendemos a amarle a Él y a los demás.
Puede que nuestra vida familiar no sea perfecta, no la que queremos, que no logremos la ansiada felicidad, pero pensemos que, a la familia de Dios no le tocó mejor suerte: fue ignorada cuando iba a nacer el Niño, fue perseguida, apenas el niño nació; tuvo que exiliarse para salvar la vida del hijo y pudo retornar cuando ya su perseguidor había muerto.
A María y José no les fue fácil ser familia de Dios, pero se mantuvieron unidos custodiando a su hijo y no perdieron de vista nunca a su Dios.
Hoy en esta fiesta de la Sagrada Familia, vamos a poner con mucha confianza con mucha esperanza, en manos de Dios, a nuestra familias con sus alegrías y sus dificultades, con sus luces y sus sombras, amémosla y cuidémosla, porque tu familia y la mía, son un regalo de Dios. ¡Qué Dios bendiga a cada familia cubana y tengamos todos una Feliz Navidad!
(Música, Dios bendice a mi familia, Samuel Hernández)
La Navidad es sinónimo de regalos, de fiestas, de saludos, de cercanía, pero hay un momento que, por la Covid, no todas estas cosas podemos compartirlas y vivirlas. El regalo más hermoso que pudiera recibir cada familia en este día es la bendición de Dios. Por eso a nuestras preces vamos a unirnos rezando y pidiendo: Sagrada Familia de Nazareth bendigan a nuestra familia.
- Para que la Iglesia, la familia de los bautizados, se mantenga unida por los vínculos del amor, y viva la fraternidad que brota de la vida en Cristo. Oremos. Sagrada Familia de Nazareth bendigan a nuestra familia
- Para que todas las naciones y sus gobernantes, promuevan en la sociedad las condiciones favorables que ayuden a fortalecer y mejorar la vida de las familias. Oremos. Sagrada Familia de Nazareth bendigan a nuestra familia
- Para que los padres y los hijos de las familias cubanas, mediante la comprensión y el diálogo recíproco, sepan construir una verdadera Iglesia Doméstica, una comunidad de fe y amor. Oremos. Sagrada Familia de Nazareth bendigan a nuestra familia.
- Para que los ancianos sean valorados en cada familia, sean apreciados y rodeados del afecto que merecen. Oremos. Sagrada Familia de Nazareth bendigan a nuestra familia.
- Para que los que sufren por causa de la ruptura de su familia, encuentren en el Evangelio la luz y la fuerza para afrontar su situación. Oremos. Sagrada Familia de Nazareth bendigan a nuestra familia.
- Para que las familias que han perdido algún familiar por la Covid o están afectadas de algún modo por esta pandemia, encuentren paz y esperanza en el Jesús que quiere nacer en sus corazones. Oremos. Sagrada Familia de Nazareth bendigan a nuestra familia.
- Para que todas las familias, vivan cimentadas en el amor, el respeto y la paz; gocen de salud, serenidad y tengan lo necesario para vivir dignamente. y sean siempre testigos del Cristo y de su esperanza. Oremos. Sagrada Familia de Nazareth bendigan a nuestra familia.
(Música, Más allá, Gloria Estefan)
Ahora todos juntos levantamos no sólo nuestra voz sino también el corazón agradecido a Dios que ha enviado a su Hijo, haciéndose hombre para salvarnos, diciéndole linda oración que el mismo Jesús nos enseñó…
Padre nuestro que estás en los cielos,
santificado sea tu nombre.
Venga a nosotros tu reino.
Hágase tu voluntad,
así en la tierra como en el cielo.
Danos hoy el pan de cada día.
Perdona nuestras ofensas,
Como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden.
No nos dejes caer en tentación,
Y líbranos del mal. Amén
Con mucha alegría y mucha gratitud a Dios he compartido este tiempo de oración y de reflexión con ustedes en un día tan especial dentro de la Navidad, como el que estamos celebrando: la Sagrada Familia de Jesús, María y José. Soy el P. Juan Elizalde, de la parroquia de Santa Teresita del Niño Jesús en Santiago de Cuba, y ahora le suplico a Dios que, a través de mí, les haga llegar su bendición.
El Señor esté con ustedes. R/ Y con su espíritu
Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, descienda sobre cada uno de ustedes y sobre sus familias, y les acompañe siempre. R/ Amén
Con mucho gusto hemos realizado este programa para ustedes desde la Oficina de Comunicación, de la Arquidiócesis de Santiago de Cuba.
Es la voz de la Iglesia católica santiaguera que se levanta para estar contigo… IRRADIA
(Música, La familia, DR)