Por: Noel Pérez

Desde su fundación, el 27 de septiembre de 2014, el Centro Loyola Santiago viene desarrollando un intenso trabajo por la formación de valores y en contribución al fortalecimiento de la sociedad civil santiaguera. En ese lapso, no pocos han sido los caminos en común transitados junto al Centro Cultural y de Animación Misionera San Antonio María Claret.

Es por ello que la presencia de Maite Pérez Millet, directora del Centro Loyola Santiago en el habitual Patio de los sueños, no fue un capricho, o una elección al azar. Todo lo contrario. Era un compromiso del Centro Claret, de contribuir a divulgar el quehacer de esta institución hermana.

El que este encuentro coincidiera con el Día de la Cultura Nacional, sí fue un regalo del azar concurrente (como diría el poeta). Y es que ambos Centros hallan en la cultura un ámbito ideal para el diálogo desde la Fe.

Maite Pérez es toda dulzura. Escucharla hablar sobre la espiritualidad ignaciana, sobre la labor del Centro Loyola Santiago, sobre los retos y los sueños por cumplir, es asistir a un ejemplo vivo de vocación que ella resume en una frase: «estoy en Loyola desde antes de nacer».

Fue un Patio hermosamente diferente. Distinguido, no solo por la sencillez, la profundidad, y la espiritualidad que transmite Maite cuando habla de lo que le apasiona; sino por la presencia, por primera vez en el Centro Claret, de alumnos y profesores de la Escuela Comunitaria de Música Lauro Fuentes, quienes ofrecieron unas cubanísimas estampas musicales.

No faltó, por supuesto, la poesía de José Orpí, quien compartió también algunos epigramas de relevantes escritores cubanos. Asimismo, Mirtha Clavería dedicó la sección de conocimiento bíblico a la figura de San Antonio María Claret, cuya Fiesta se estará celebrando en nuestra comunidad, el venidero 24 de octubre, marcado por el aniversario 150 del fallecimiento del otrora Arzobispo de Santiago de Cuba.