Por: Milvian Rodríguez Despaigne 

Una vez más,  como otrora,  los caminantes de Emaús se hicieron presentes para llevar un rayito de esperanza y la verdad de la palabra a quienes más lo necesitan. Once hermanos de la familia de Emaús,  llegaron hasta el Hospital “Dr. Ambrosio Grillo” en el poblado El Cobre y de esta manera ofrecieron un poco del consuelo que solo Dios nos puede dar y, además animaron al personal médico y paramédico que con tanta dedicación atiende a enfermos y sus familiares.

Visitaron distintas salas de la mencionada entidad hospitalaria y conversaron con los enfermos y quienes les acompañan, estos recibieron con agrado oraciones, estampas de la Virgen y publicaciones de la iglesia, mientras doctores, enfermeras y trabajadores en general disfrutaron de un riquísimo café que los hermanos de Emaús les convidaron.

Un momento especial se vivió en la sala de espera con los familiares de los enfermos graves que se encuentran en la UCI o como muchos conocen la Sala de Terapia Intensiva. Allí Jesús se hizo más que presente a través de estos misioneros que junto a los que aguardaban noticias de sus enfermos, hicieron una profunda y sentida oración por todos ellos.

De gratificante y conmovedor fue catalogado el encuentro que evidentemente dejó huellas de amor y esperanza en todos, cumpliéndose así, de esta forma, lo que el Señor nos manda a hacer: “Estuve enfermo y me visitaste”. No hay alegría más alta que la de poder servir con entrega.