Una iglesia donde quepan todos
Por: Noel Pérez García, CCAM
Arquidiócesis de Santiago de Cuba, 24 de mayo de 2019 / Si tuviera que definir en una palabra al P. Rogelio Deán Puerta, sería PASIÓN. Ello se nota desde la primera frase con la que comienza a hablar de su tránsito hasta la ordenación como nuevo párroco de Baire; y también en la manera que describe cada una de las fotografías o videos que muestran el quehacer de su parroquia; que no es poco.
Habanero de nacimiento, asegura que Santiago de Cuba le ayudó a liberarse, a sentirse mejor con él mismo. Quizás por ello le brillan los ojos cuando habla de su llegada a una humilde parroquia de un municipio santiaguero, con un templo en mal estado, en el que hoy hay que celebrar tres misas los domingos para poder dar cabida a todos los que hasta allí llegan.
Por esa pasión, quizás, se atreve a cantar acompañado de una guitarra y recitar un poema de su inspiración, escrito en aquellos tiempos de seminario, cuando las fuerzas parecían flaquear. Por esa pasión llevó hasta el III Frente la imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre, único lugar de Cuba al que la Patrona no había llegado.
Con una humildad extraordinaria, formada en una profunda espiritualidad mariana («María nos enseña a servir, a desaparecer, a hacernos pequeños para que Jesús aparezca», dice el padre Deán Puerta), compartió durante más de una hora sus experiencias, sus alegrías, sus sueños, como invitado especial de El Patio de los Sueños.
Preguntado, precisamente, por sus sueños por cumplir, no dudó en afirmar: «Sueño con una iglesia donde quepan todos».