Por: Mercedes Ferrera Angelo

La noche del sábado 26 de diciembre fue tiempo para la música navideña en la Santa Basílica Metropolitana Iglesia Catedral de Santiago de Cuba. El concierto estuvo a cargo del Orfeón Santiago dirigido por Sonia Ivette García.

En un recorrido a través de dieciséis canciones navideñas, el insigne coro de Santiago de Cuba hizo una trayectoria realmente encomiable que incluyó obras de varios países y géneros musicales. Desde el tradicional “Venid Fieles Todos” hasta una melodía brasileña en el cierre, que cautivó a los presentes.

Como momentos muy significativos pueden tomarse los relacionados con la presencia de los más jóvenes. La adolescente de 14 años Liz Emile, interpretó un solo de violín en una de las piezas y la pequeña María del Pilar, con solo diez años, puso su voz a “Noche de Paz”, logrando que por un instante pareciera que un pequeño ángel se hubiera brindado a cantarla.

Junto a la música se presentaron textos muy breves que ayudaban a los presentes a descubrir el verdadero sentido de la Navidad y cómo ese sentido se expresa mediante la música, que a través de la historia, y en medio de las más diversas situaciones nunca ha dejado de ser parte importante del espíritu navideño.

En las palabras finales el P. Jorge Catasús, párroco de Santa Lucía y responsable de la Comisión Arquidiocesana para la Cultura, expresó el agradecimiento de la Iglesia y de los presentes por este espacio dedicado enriquecer el alma. Agradecimiento, además, porque hasta parece que todo lo visto y disfrutado nos hiciera olvidar, al menos temporalmente, los difíciles momentos vividos y los que aún se viven, provocados por la pandemia.

Escuchar esas interpretaciones fue algo realmente sanador, como un bálsamo derramado sobre una zona sensible, herida o quemada. El Orfeón Santiago incluye a la S.B.M.I. Catedral, como un escenario privilegiado por estas fechas. A ellos, por el trabajo que realizan, la felicitación de todos los presentes y el agradecimiento imprescindible en este tiempo navideño.