CARISMA 

En Jesús servidor, la Sierva del Corazón de María, se descubre profundamente amada por el Padre,  hace de Él principio y centro de su vida  y busca su voluntad en un constante espíritu de discernimiento. 

ESPIRITUALIDAD 

La Sierva del Corazón de María es una mujer que da testimonio en la Iglesia y en el mundo  de la experiencia del Amor del Padre,  a la manera de María sierva: 

• Creyendo en el Dios de lo imposible, acoge con humildad las sorpresas del Espíritu
• Saliendo sí misma se entrega con generosidad al trabajo sencillo y laborioso
• Encarnando los valores de la sagrada familia de Nazaret trasmite y celebra la vida.

La sencillez, la confianza y el abandono en el Dios providente marcan su vida cotidiana.

Su celo apostólico la mueve a estar cerca de su pueblo, atenta a sus necesidades para responder discretamente en un servicio que dignifica a la persona. 

MISIÓN

 Las Siervas del Corazón de María nos reconocemos enviadas a servir en Cuba,

para -desde nuestro carisma- vivir y  ayudar a construir la Iglesia comunión

y favorecer procesos integradores de fe y humanidad.

Ejerciendo un liderazgo inspirado en María sierva.

Privilegiando los lugares alejados, la búsqueda de sentido de la vida y la persona rota.

FUNDADORES

P. Francisco Delaplace

Juana María Moisán